Skip to main content

Blanqueamiento dental

Unos dientes más blancos nos dan un aspecto más sano y limpio, así que el tono de color del esmalte es una de las preocupaciones más habituales a las que se enfrenta la estética dental.

El esmalte es una dura capa que recubre la corona de la dentición y protege las capas internas frente a los efectos de los ácidos y de la placa bacteriana, así como del contraste de las temperaturas muy frías o muy calientes, que pueden provocar sensibilidad dental.

La gama de color del esmalte puede oscilar naturalmente entre el amarillo claro y el blanco grisáceo. Con el paso del tiempo, el esmalte va perdiendo su color original, además, el obscurecimiento dental puede deberse a diferentes causas: la edad, una mala higiene bucodental, el tabaco, los hábitos alimenticios (como el vino) o el consumo de algunos fármacos.

También pueden aparecer antiestéticas manchas blancas, ya sea por una mineralización insuficiente durante la infancia, la descalcificación provocada por los ácidos y la acumulación de placa bacteriana, el exceso de flúor o, de nuevo, el consumo de algunos medicamentos. Estas manchas pueden provocar la aparición de caries, así que es importante tenerlas controladas en las revisiones periódicas con tu dentista en Valladolid para minimizar este riesgo.

Auxiliar de clínica aplicando blanqueamiento a paciente

Qué es el blanqueamiento dental

El blanqueamiento dental es un tratamiento que nos permite aclarar el color de los dientes que han perdido su blanco natural en hasta ocho tonos. Es un proceso sencillo, ambulatorio, que en Clínica Dental Moreda realizamos con tecnología láser.

Es un tratamiento sencillo y cómodo para el paciente, y sus resultados se pueden apreciar de manera casi inmediata.

"El blanqueamiento es un tratamiento que debe de estar controlado por un odontólogo ya que no está recomendado para todos los pacientes."

El blanqueamiento dental combinado

blanqueamiento inicio blanqueamiento fin

Este tratamiento es un procedimiento que combina la acción de los kits de férulas realizadas a medida con una sesión de lámpara led de luz fría o láser, que favorece la actuación de los agentes blanqueadores.

  1. Lo primero es una revisión bucal por parte de un odontólogo, ya que el blanqueamiento es un tratamiento que no está recomendado para todos los pacientes.
  2. A continuación, realizamos una higiene dental para asegurarnos de que vamos a trabajar en una boca 100 % limpia de placa bacteriana.
  3. El paciente recibe unas férulas con gel blanqueador creadas a medida que debe llevar puestas por la noche durante 15 días.
  4. Es entonces cuando llevaremos a cabo la sesión con tecnología láser.
  5. El paciente debe usar un segundo kit de blanqueamiento durante los siguientes 15 días.
  6. Para finalizar, el experto hace una valoración de los resultados.

Debemos resaltar que el tratamiento del blanqueamiento dental puede no ser definitivo. Para alargar su efectividad es importante respetar las pautas indicadas por el odontólogo, pero, a veces, es necesario recurrir a mantenimientos periódicos con gel blanqueador.