Mantener las encías en buen estado es mucho más importante de lo que puedas pensar, ya que de su buena salud depende también la del diente. Al ser una zona más delicada, no es tan complicado llegar a desarrollar una enfermedad periodontal. De hecho, con el simple hecho de relajar tus rutinas de higiene oral, es probable que surja una infección en el tejido blando. Ya que, en Clínica Dental Moreda, siempre tratamos casos de gingivitis y periodontitis en Valladolid, queremos ayudarte a diferenciar estas dos patologías y, sobre todo, a evitar que tengas que sufrir sus efectos.
¿Qué tienen en común los casos que tratamos de gingivitis en Valladolid?
La gingivitis es la patología más común relacionada con las encías y, por suerte, también la menos grave. Generalmente está causa por acumulación de bacterias en la superficie del diente, en los espacios interdentales o en los márgenes de la encía, aunque también puede estar provocada por algunos medicamentos, enfermedades como la diabetes o circunstancias temporales, como un embarazo.
La mayoría de nuestros pacientes acuden a revisión cuando la inflamación, el enrojecimiento y el sangrado comienzan a ser constantes, una situación que, recuperando unos buenos hábitos de higiene oral, se suele controlar a tiempo.
¿En qué momento comienza a tratarse como un caso de periodontitis?
Como expertos en periodoncia en Valladolid, te aseguramos que notarás rápidamente la diferencia entre una gingivitis y una periodontitis, ya que las segunda trae consigo efectos mucho más severos, a raíz de extender la primera en el tiempo.
Además de afectar directamente a las encías, la periodontitis o piorrea también pone en peligro los ligamentos periodontales e, incluso, el hueso que sujeta la pieza, por lo que comienza a formarse un hueco visible entre la encía y el diente.
Por lo tanto, esta situación también suele venir acompañada de claras molestias, algo que no es tan común en una gingivitis.
¿En qué casos es necesaria una cirugía periodontal?
Si la piorrea está muy avanzada, es necesario recurrir a una pequeña intervención quirúrgica que nos permitirá limpiar a fondo las bolsas periodontales, eliminar la infección y regenerar la zona tratada.
De esta forma, conseguiremos recuperar el buen estado de las encías y, tras un tiempo de recuperación, podrás volver a sonreír con total confianza.
No obstante, desde Clínica Dental Moreda, te recordamos que el mejor arma en estos casos es la prevención, así que cepilla siempre tus dientes y encías de forma minuciosa y, sobre todo, no dejes de venir a revisión frecuentemente. Incluso aunque pienses que no lo necesitas, ¡ven a vernos!