La caries es una enfermedad infecciosa y multifactorial que comienza manifestándose de forma casi imperceptible y que ocasiona una destrucción progresiva de la estructura de los dientes, provocada por el ácido que generan unas bacterias que viven en la superficie dental y que forman la placa bacteriana.
En ella intervienen factores relacionados con el huésped, factores relacionados con la dieta, factores relacionados con los microorganismos y factores relacionados con el tiempo -a mayor tiempo de exposición del diente a los ácidos producidos por las bacterias, mayor riesgo de caries-.
Existen dos tipos de caries dentales: la caries coronal y la caries radicular.
- Caries coronal: es la más sencilla de identificar por el cambio de coloración que presenta. Se da tanto en niños como en adultos y, por norma general, se produce sobre las superficies de masticación.
- Caries radicular: es más común en ancianos ya que, a medida que envejecemos, las encías se retraen dejando expuestas partes de la raíz del diente. Como las raíces no están recubiertas por esmalte, quedan expuestas y pueden infectarse con facilidad.
¿Cómo se produce la caries?
La caries comienza con la formación de la placa dental, nacida a partir de restos alimenticios que se depositan en la superficie de las piezas dentarias. Estos, al fermentar, favorecen el crecimiento y la colonización de bacterias en la dentición.
Al ser un proceso lento, los primeros síntomas son muy complicados de percibir. La única forma de saber si tenemos caries de forma precoz es a través de una exploración profunda de la cavidad oral por parte de un odontólogo. A pesar de ello, existen ciertas señales que podemos percibir y que nos alertarán. Al inicio, observaremos un cambio de color en los molares, sobre todo en las superficies de masticación y contacto de unas piezas con otras.
Cuando la infección avanza hacia el interior, surgirá el malestar al tomar alimentos azucarados, muy fríos o calientes. Esto es debido a que el nervio se encuentra prácticamente desprotegido. Cuando la caries está avanzada, se sufre un dolor intenso y, tras ello, la rotura y pérdida de la integridad de la pieza dental.
¿Cómo se puede prevenir?
Estos hábitos nos ayudarán a prevenir la caries:
- Cepillar los dientes tras cada comida con un dentífrico que contenga flúor.
- Usar hilo dental y cepillos interdentales.
- Enjuagar la cavidad oral con colutorio.
- Aplicar de flúor.
- Acudir periódicamente a tu dentista en Valladolid de confianza.
Si has percibido algún síntoma, no dejes que pase más tiempo: pide tu cita en Clínica Dental Moreda y te ayudaremos a solucionar tu problema.
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